Urueña, la única Villa del Libro en España, es un atrayente cultural para cualquier viajero
Por Javier Abad
Ya antes de Cristo, en lo más hondo de nuestro pasado señalaba Cicerón: “Un hogar sin libros es como un cuerpo sin alma”. Dicen que a la lectura sólo hay que dedicarle los ratos perdidos, que se pierde vida mientras se lee. Lo cierto es que, agradable pasatiempo para muchos, obligación para otros, leer es un beneficioso ejercicio mental.
Favorecer la concentración y la empatía, prevenir la degeneración cognitiva y hasta predecir el éxito profesional son sólo algunos de los beneficios encubiertos de la lectura. Sin contar que “el acto de leer forma parte del acto de vivir”, dice el exministro Ángel Gabilondo, catedrático de Filosofía en la Universidad Autónoma de Madrid. Para Gabilondo, la lectura “crea, recrea y transforma. Una buena selección de libros es como una buena selección de alimentos: nutre”.
Decía el célebre escritor Miguel Delibes que “si el cielo de Castilla es alto es porque lo habrán levantado los campesinos de tanto mirarlo”. Y es cierto que cuando alguien llega a Urueña (Valladolid), no se cansa de admirar el horizonte de la Tierra de Campos.
Un pueblo literario. Este último término consta de nueve letras. Quizá cada una de ellas represente a las 9 librerías que alberga el pueblo, de tan solo 200 habitantes. Sí, has leído bien. Nueve librerías posee este municipio vallisoletano a 40 kilómetros de la capital. Un lugar donde la lectura recorre cada calle y esquina que la componen. Por eso la llaman La Villa del Libro.
La Villa del Libro es una atractiva propuesta de turismo cultural que la provincia de Valladolid ofrece a viajeros y bibliófilos de todo el mundo. Una gran iniciativa de la Diputación provincial que en 2007 fundó esta villa literaria, la primera Villa del Libro de España.
Un plan cultural que está inspirado en otras villas del libro existentes en Europa: Hay-on-way, en el País de Gales -la más antigua-, Redu en Bélgica, Montolieu en Francia, Bredevooort en Holanda… El denominador común de todas ellas es la dinamización económica, cultural y turística a partir de la recuperación de los espacios públicos como lugares de compraventa de libros y la celebración de eventos culturales ligados a la literatura.

Se constituye en un lugar en el que el libro es un atrayente para viajeros que, van a la búsqueda de algo diferente a lo habitual; un espacio de encuentro para un número importante de personas expertas o de curiosos, que han hecho del libro y los sectores en él implicados una forma de vivir.
El e-LEA (espacio para la Lectura, la Escritura y sus Aplicaciones) es el espacio principal de la Villa del Libro. Un centro para la promoción del Libro y de la Cultura que detenta en algo más de 1000 metros cuadrados de superficie una Biblioteca especializada, Talleres, Sala de Exposiciones y un pequeño jardín. También contiene un Salón de Actos con capacidad para cien personas, idóneo para acoger buen número de eventos culturales: congresos, simposios, jornadas, conferencias, presentaciones de libros, recitales de poesías y lecturas. En el jardín del Centro e-LEA Miguel Delibes dedicado a El Norte de Castilla, se celebran entre otras actividades las Veladas poéticas ‘A la sombra del ciprés’, donde han pasado nombres como Carlos Aganzo o Ignacio Elguero.
La exposición permanente del Museo del Cuento de la Villa del Libro está formada por las creaciones artísticas de Rosana Largo. Se exponen la representación de los más conocidos relatos de la literatura clásica infantil: La Cenicienta, La Bella Durmiente, Alicia en el País de las Maravillas, Peter Pan, Pinocho, Caperucita Roja, Blancanieves, entre muchos otros.
También se puede ver una destacada colección de libros desplegables y objetos curiosos.
FUTURO PROMETEDOR
Por todo ello, Urueña ha sido elegida como proyecto piloto para la puesta en marcha de una aplicación móvil, gracias a un programa europeo de la Comunidad Digital para fomentar la innovación y modernización territorial, en este caso como estrategia de innovación turística e integración de TIC, que pretende aprovechar las nuevas tecnologías para favorecer la difusión de los recursos ambientales y culturales. La ‘app’ ofrecerá al visitante los puntos de interés, vídeos e incluso música de ambiente.

